La estandarización de la presente propuesta, pensada y aplicada a metodologías a distancia y presenciales, ha permitido que estudiantes y familias desarrollen el principio de autonomía, el cual ha sido uno de los resultados positivos que ha impulsado su constante adecuación al trabajo diario. Así pues, la continuidad de la experiencia se ha dado a partir de la aplicación de las siguientes acciones: 

 

El diseño de las guías es inherente al proceso de planeación docente, siendo estas el material explícito al que los estudiantes acceden para abordar tanto la conceptualización como los ejercicios prácticos.

 

El desarrollo de la guía como instrumento de evaluación a procesos de investigación y secuencias didácticas. 

 

Transversalización de saberes a través de las guías, en las que se entiende el conocimiento como una interacción de todas las áreas, mediadas por las competencias específicas de cada una. 

 

Disponibilidad de la guía como conducto a seguir en situaciones de ausentismo de docentes y estudiantes, lo cual garantiza que el ritmo de trabajo y procesos llevados al interior del aula sean afectados en menor medida. 

 

La fácil accesibilidad a las guías, es una acción que ha posibilitado la institucionalización de esta propuesta y el alcance a toda la comunidad educativa. 

 

Estas acciones permitieron que esta pasara de ser una estrategia contingente a un instrumento pedagógico favorecedor de los procesos académicos de todos los estudiantes en la presencialidad.